DRAMAS    BOLIVIANOS


 

Advertencia oficial:
Bolivia amenaza boicotear Arica 

EMOL, Viernes 8 de octubre de 2004

Una dura advertencia oficial lanzó ayer Bolivia contra Chile si no revierte la concesión del puerto local al Consorcio Portuario Arica, concretada el 1 de octubre último.

El vecino país no sólo desviará al sur del Perú todas las cargas que transfiere a través de los terminales de Arica y Antofagasta, sino que aplicará un "impuesto de paso" a las mercaderías de terceros países que crucen por su territorio hacia Chile.

Así lo adelantó ayer a "El Mercurio" el vicecanciller de Bolivia, Jorge Gumucio, antes de reunirse con su similar de Chile, Cristián Barros, para reclamar por la concesión al monooperador.

"Vamos a poner un impuesto de paso para salir por Chile. (Las mercaderías) pueden venir por Bolivia a Arica siempre que paguen una sobretasa de tránsito. Hacia Perú ésta será cero".

Gumucio dijo que la medida se sustenta en que Bolivia no está obligada a la reciprocidad en el libre tránsito que le brinda Chile por el Tratado de 1904, pero sí la tiene con Perú gracias a un tratado que firmaron en 1905.

El vicecanciller de Chile, Cristián Barros, desestimó las críticas del gobierno boliviano.

La licitación del puerto de Arica "no va en contra de ningún acápite o acuerdo, o ni siquiera enunciado de acuerdo suscrito con Bolivia", aseguró el vicecanciller de Chile, Cristián Barros, ante la decisión del gobierno de Carlos Mesa de boicotear la salida sus productos por puertos nortinos de nuestro país.

Las autoridades bolivianas están tomando represalias al estimar que subirá el costo de sus embarques tras la licitación del recinto portuario. Por ello, están realizando gestiones ante Perú para habilitar en su favor El Callao e incluso el sitio 7 de Arica, actualmente al servicio de Perú.

La molestia en Bolivia llegó al punto máximo la semana pasada, cuando el Consorcio Portuario Arica S.A. publicó sus nuevas tarifas. Según cálculos de los empresarios bolivianos, los valores elevan en 200% los costos por los servicios.

Chile no es indiferente a los pasos que siga Bolivia. Actualmente, esa nación utiliza el puerto de Arica para sacar el 60% de su comercio exterior. Además, ese terminal recibe 6 millones de toneladas de carga que vienen desde Brasil y deben pasar por Bolivia.

Cristián Barros dijo que los cálculos bolivianos sobre las alzas de costos portuarios no tienen asidero técnico y precisó que ellas se verán compensadas por la eficiencia. También aseguró que habrá menores tiempos de permanencia de barcos esperando cargas y que disminuirá la pérdida de material a granel durante su embarque.

Agregó que los bolivianos olvidan que el concesionario asume las tarifas preferenciales que benefician a Bolivia en el almacenamiento (gratuito hasta en 365 días), en cargas FIO (que significa que el costo de la descarga es de quien contrata el flete) y cargas peligrosas.

Bolivia pide que Chile garantice que la agencia estatal ASPB (Administradora de Servicios Portuarios de Bolivia) siga a cargo del transporte de las mercaderías del vecino país, tarea que ya comenzó a asumir en forma exclusiva el nuevo monooperador.

A juicio de Barros, el libre tránsito que aplica Chile en favor de Bolivia no implica que Bolivia tenga derechos a manejar el transporte de las cargas portuarias aunque vayan a su territorio.

El vicecanciller es partidario de habilitar Iquique como tercer puerto nacional al servicio de Bolivia, tras Arica y Antofagasta.

Aunque ello no le desagrada a Bolivia, la Cámara Marítima y Portuaria de Chile manifestó su inquietud por la imagen de inseguridad debido al paro de los estibadores de ese recinto.

Más reclamos por el azúcar

A las quejas de Bolivia por el cambio de manos del puerto de Arica se sumaron nuevos reclamos por el azúcar. Ayer jueves, el Instituto de Comercio Exterior (IBCE) deploró la decisión del Gobierno de Chile de suprimir un cupo para la importación preferencial de 12.000 toneladas de azúcar boliviana.

El presidente de ese organismo, Gabriel Dabdoub, aseguró que éstas son "señales de poca amistad hacia Bolivia, que no ayudan a restaurar las confianzas que se han ido perdiendo con el tiempo".

Aseguró que ésa es una medida unilateral que no se explica, dado el déficit de producción de 160 mil toneladas que posee Chile y los bajos volúmenes que envían a nuestro país.